Perros que entienden nuestros gestos

viernes, 31 de diciembre de 2010

LA COMUNICACIÓN CON EL PERRO

El resto de posiciones corresponderán a estados intermedios, donde varios impulsos o motivaciones entran en conflicto. Así, la posición C2 describe un perro que se muestra extremadamente agresivo pero que a la vez experimenta un ligero grado de miedo. La figura C3 define a un individuo que muestra una agresividad  

 
 
 
 
 
 
 
 
MIEDO  
Representación esquemática de las principales posturas faciales que puede mostrar un perro. De izquierda a derecha, aumenta la agresividad; de arriba abajo, se incrementa el miedo.
 3 Lengua.1.2.je corporal
Posturas corporales y faciales de un perro que pasa de un estado de calma a uno de agresividad.
Posturas corporales y faciales de un perro que pasa de un estado de calma a uno de sumisión.
 
 
 
La rigidez que presenta el lenguaje corporal del perro en cuanto a su interpretación supone una gran ventaja desde el punto de vista de su adaptación evolutiva: la ausencia de ambigüedades. De existir éstas, la comunicación entre diferentes individuos del grupo resultaría muy difícil, favoreciendo la aparición de peleas incontroladas. Este último hecho conduce a la última y verdadera función de la comunicación: la influencia que a través de ella un individuo puede ejercer sobre otro. Así, por ejemplo, la presentación de un gesto de sumisión tiene el efecto directo de inhibir las conductas agresivas en el animal que la está observando, evitándose el derramamiento de sangre de forma innecesaria. De ese modo, la lucha entre los perros se parecería a un combate de esgrima, donde la sola colocación del sable sobre el cuerpo del contrario le otorga a uno la victoria.
El lenguaje corporal es un rasgo común a todos los perros, no importa su raza o sexo. Sin embargo, algunos de ellos pueden mostrar variaciones sobre el patrón básico hasta ahora descrito. Por ejemplo, aquellos ejemplares con la cola corta compensan la relativa incompetencia de ésta como arma comunicativa moviendo todo el tercio posterior de su cuerpo. Del mismo modo, aquellas razas con las orejas grandes y caídas o con pelajes excesivamente largos pueden no mostrar algunos de los elementos del lenguaje antes descritos de una forma clara, como la imposibilidad de colocar las orejas en posición totalmente erguida ola incapacidad de erizar el pelo, respectivamente.
En las figura 16 y 17 quedan esquematizadas las principales posturas corporales que puede mostrar un perro, incluidas las muecas faciales. Sin embargo, dicho esquema sólo es una simplificación extrema de un casi infinito repertorio de posiciones que el animal puede adoptar.
En general, las posturas del perro podrían clasificarse como aquellas que incluyen un mensaje de dominación o de autoridad y aquellas que comportan una actitud de sumisión. En las posturas dominantes, el animal tiende a aumentar su tamaño, erizando el pelo, levantando la cabeza y situando su cola en posición erguida y rígida. En las muestras de sumisión, por el contrario, el animal tiende a encogerse. Para conseguirlo, el lomo adopta una posición encorvada, la cola se esconde, la cabeza desciende y las orejas se pliegan.
extrema, a la vez que un miedo extremo. Este tipo de situaciones ambiguas son, en concreto, las que con más frecuencia observaremos en la realidad.

LA COMUNICACIÓN EN EL PERRO
Una de las características fundamentales que permiten definir al perro como especie animal es aquella que hace referencia a su estructura social. Los perros, al igual que sus antepasados los lobos, han basado gran parte de su éxito en la posesión de una estructura social altamente compleja y organizada. Si se piensa en el caso de la especie humana, es fácil darse cuenta de las ventajas que supone la vida en comunidad. En el caso de los cánidos, la organización en grupos ofrece la capacidad de poder cazar de una forma más eficiente, al mismo tiempo que reduce el peligro de sufrir un ataque por parte de otros depredadores. Para que dicha estructura social no funcione de un modo caótico, es necesaria la existencia de un sistema que permita una buena comunicación entre cada uno de los miembros que la integran. Para comunicarse con sus semejantes, el perro utiliza principalmente tres de sus sentidos: la visión, el olfato y la audición. Mediante dichos canales sensoriales, el perro es capaz de mostrar sus intenciones a la vez que percatarse de las intenciones del resto de sus compañeros. En último término, los fenómenos de comunicación permiten que la conducta de un individuo (el emisor) pueda modificar el comportamiento de otro individuo (el receptor) y viceversa.
En su convivencia con el hombre, el perro aprende a considerarlo como miembro de su propia manada. En la medida en la que el propietario sea capaz de entender el lenguaje de su perro, tendrá la posibilidad, no sólo de comprender sus intenciones y sus estados de ánimo sino de poder llegar a influir en su conducta de una forma correcta y natural. De los diferentes tipos de comunicación que utiliza el perro, la
de carácter visual es la que cuenta con un mayor interés práctico. El hombre, y en general todos los primates, es una especie fundamentalmente visual. Por ello, el lenguaje visual del perro es el que más fácilmente puede llegar a entenderse y dominar.
3.1. COMUNICACIÓN VISUAL 3.1.1. Posturas faciales
Resulta extremadamente fácil adivinar las intenciones de un perro si conocemos, aunque de una forma mínima, sus expresiones. En la figura 15 quedan esquematizadas las principales posturas faciales que adopta el perro. Empecemos por el perro del extremo superior izquierdo. Ésta es la postura denominada neutra o de relajación. A partir de este punto, siguiendo la primera fila hacia la derecha, nos encontramos con un animal cada vez más agresivo. Si desde la posición neutra nos desplazamos ahora hacia abajo, cada vez podemos observar una expresión de más miedo. En definitiva, si nombramos las columnas como A, B, C y las filas como 1, 2, 3:
El perro A1 corresponderá al estado neutro.La posición C1 corresponderá a la agresividad extrema.La posición A3 corresponderá al miedo extremo.

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